Soledad Gómez
Todo comenzó con un pequeño bultito en el párpado inferior que, en seguida, preocupó a Soledad Gómez. Su médico de cabecera, sin embargo, no le dio mayor importancia pero Soledad siguió dando vueltas hasta que consiguió que la mandaran al especialista.“No me dolía, pero notaba que me crecía día a día; a veces se caía una parte pero volvía a reproducirse”, recuerda.